Cada 12 de mayo, el mundo conmemora el Día Internacional de la Mujer Matemática, una fecha que coincide con el nacimiento de Maryam Mirzakhani, la primera mujer galardonada con la medalla Fields en 2014. Esta celebración no solo rinde homenaje a Mirzakhani, sino que también destaca la historia de muchas mujeres que han hecho contribuciones significativas en el campo de las matemáticas y la ciencia. En el mismo día, se recuerda a Florence Nightingale, nacida en 1820, quien utilizó las estadísticas para salvar miles de vidas durante la guerra de Crimea aplicando mejoras en las condiciones de los hospitales. Estas mujeres, entre muchas otras, han demostrado cómo las matemáticas pueden servir para mejorar la vida de las personas, especialmente de aquellas en situaciones vulnerables.
Priscilla Wakefield, una pionera en el ámbito del ahorro financiero y la educación de las mujeres, fundó en 1798 la primera caja de ahorros para mujeres y niñas en Londres, en un tiempo donde las mujeres eran legalmente excluidas del manejo del dinero. Con su visión ética y sin ánimo de lucro, Wakefield enseñó a las mujeres no solo a manejar su economía, sino también a ejercer su autonomía. Su escuela, la School for Industry, ofrecía educación en lectura, escritura y matemáticas, donde sumar y calcular se transformaba en un acto de resistencia y dignidad. Su impulso por el conocimiento matemático fue un precursor de la educación STEM, mostrando que el aprendizaje de las ciencias no solo debía servir a la competencia, sino a la supervivencia diaria de las mujeres.
Maria Mitchell, la astrónoma estadounidense, nació en 1818 en Nantucket, Massachusetts, y se convirtió en un símbolo de la lucha por los derechos de las mujeres en la ciencia. Con el apoyo de su familia cuáquera, tuvo acceso a una educación que le permitió desarrollar su pasión por la astronomía. A los 14 años, ayudaba a su padre en la calibración de instrumentos y, en 1847, hizo un descubrimiento crucial al identificar un cometa, logrando reconocimiento internacional y rompiendo barreras significativas en la ciencia. Como primera mujer en ser admitida en la Academia Estadounidense de las Artes y las Ciencias y al ser contratada como profesora de Astronomía en Vassar College, Mitchell no solo abrió las puertas a las científicas del futuro, sino que también luchó por la igualdad de salarios y derechos para las mujeres en la academia.
En el ámbito de la contabilidad, María Guerrero se alzó como la primera mujer titulada oficialmente como contadora en México y en el mundo en 1908. En una época marcada por la exclusión de las mujeres en muchas profesiones, Guerrero optó por desafiar las normas sociales al inscribirse en la Escuela Superior de Comercio y Administración. Su examen profesional, defendido ante un tribunal exclusivamente masculino, marcó un hito en la historia, al ser reconocida por su vasto conocimiento y determinación. Y aunque su carrera fue solitaria, Guerrero se comprometió a enseñar a otras mujeres, rompiendo así el estigma que rodeaba a la contabilidad como un campo reservado a hombres, y asegurando que futuras generaciones de mujeres tuvieran acceso a una educación en finanzas.
El Día Internacional de la Mujer Matemática es un recordatorio poderoso de las contribuciones incalculables de mujeres como Maryam Mirzakhani, Florence Nightingale, Priscilla Wakefield, Maria Mitchell y María Guerrero. Estas mujeres no solo triumpharon en sus respectivos campos, sino que también abrieron caminos para que otras pudieran seguir. Celebrar sus logros es crucial en la lucha continua por la igualdad de género en la ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM), así como en todas las áreas del conocimiento. Al honrar sus legados, se inspira a las nuevas generaciones a seguir avanzando en la búsqueda de un mundo donde todas las mujeres tengan las mismas oportunidades para brillar y hacer una diferencia.










